La fascinante historia del movimiento continuo

Aroca Sanz, Juan

La fascinante historia del movimiento continuo - 1a ed. - México, D. F. Hispano Americana c. 1963 - 229 p. il. byn

Apéndices sobre el contenido de los capítulos, p.209-229.



Los "móviles perpetuos" y los "motores perpetuos". Villard de Honnecourt, o la primera versión gráfica que se conoce sobre el movimiento continuo. Leonardo Da Vinci y el movimiento continuo. De las ruedas con pesos oscilantes a los planos inclinados. Primeros aparatos inspirados en la piedra imán. El siglo XVII, rico en aportaciones, controversias, esperanzas... y más fracasos. Un noble, el marqués de Worcester, "demuestra" a Su Graciosa Majestad Británica que él "lo ha conseguido". El obispo Wilkins, o la puerta abierta a la esperanza. Un caso que, a pesar de todo, sigue envuelto en el más indescifrable misterio: el del discutido inventorJean Ernest Eli-Bessler, má conocido como Orrffyreus. El dispositivo de James Jurin. La membrana osmótica de Juan Bernoulli. Un profesor italiano de Matemáticas superiores expone un nuevo argumento en favor del movimiento continuo. Schwiers y la falta de respeto del señor Richard Varley. El Siglo de Oro del Movimiento Continuo ha terminado. El zapatero y el sabio, o el primer invento que arma revuelo en el siglo XIX. Las opiniones de Mr. Welch. "Esposizione di una Macchina a Mercurio o Argento vivo". Mercurio, tubos, bolas y brazos articulados. Un experimento al alcance de cualquiera. El sistema del Gobernador de la isla de Trinidad. El sifón perpetuo del señor Eaton. Dos casos de constancia ejemplar. Empieza el siglo XX.


FÍSICA

82-96 ARO